Los bochornos en la menopausia

¿Qué son los Bochornos?

Los bochornos son la sensación repentina e intensa de calor en el rostro y la parte superior del cuerpo, que puede estar precedida o acompañada de agitación, sudor, náuseas, mareo, ansiedad, dolor de cabeza, debilidad o una sensación de sofocación. Los bochornos descritos como calores descendentes en todo el cuerpo se presentan en el 70% de las mujeres que han tenido su menopausia, pero también aparecen en las mujeres jóvenes que han sufrido de extracción de ovarios. El tiempo promedio de presentación de esta alteración es de 1 año, aunque pueden durar por varios años y se caracteriza en la mayoría de las mujeres por un período de malestar que antecede al bochorno, como la sensación inicial de opresión en la cabeza que continúa con dolor de cabeza que incrementa hasta que el bochorno se hace presente, también se describe que los calores pueden ser precedidos por palpitaciones, aunque esto en menor frecuencia.

¿Cuál es el origen de los Bochornos?

Los bochornos inician cuando las menstruaciones en la mujer se hacen irregulares y desaparecen cuando la menstruación ha desaparecido, ya que no se ha demostrado que los bochornos inicien en las mujeres que cursan con la posmenopausia.

La causa de los bochornos es una dramática baja en la concentración de hormonas femeninas como son los estrógenos que involucra a su vez la disminución de otras hormonas que regulan la temperatura ocasionando una alteración de la función reguladora de la temperatura a nivel del sistema nervioso central.

¿Cómo se presentan los Bochornos?

Esta sensación de calor inicia en la cabeza y cuello, que en la mayoría de los casos van descendiendo en forma de ondas hacia el resto del cuerpo, agregándose posterior a esto un momento de sudoración en todas las zonas del cuerpo, pero de forma más marcada en la parte superior del cuerpo. Estos tienen una duración de entre 15 a 30 minutos, presentándose en cualquier hora del día, incluso durante el sueño, lo que puede ser causa de dificultad para dormir y su frecuencia puede variar mucho, desde una vez al mes hasta cada media hora, ya que cada mujer experimenta una forma diferente de presentación de los bochornos, inclusive cada mujer puede tener cambios en la forma de presentar los bochornos conforme avanza la posmenopausia.

Cuando se inicia el bochorno aparece sudor en la piel de la frente, en forma de gotas por lo que también se llama frente perlada, lo que indica una resistencia de la piel a los cambios hormonales, pero a pesar de estos cambios, se presenta un leve aumento de la temperatura corporal, entre 1° a 4° C, y aunque solo se percibe en la parte superior del cuerpo, el fenómeno ocurre en todo el cuerpo. Posterior al bochorno las mujeres experimentan una sensación de frío debido a la pérdida de calor.

Los bochornos se presentan con mayor frecuencia e intensidad en temperaturas cálidas.

¿Qué hacer cuando llegan los bochornos?

Aunque los bochornos están muy relacionados con los cambios de las hormonas en la mujer menopáusica, existen otros factores que pueden hacer que el control de la temperatura corporal no funcione bien. Estar al tanto de esos cambios y hacer algo al respecto puede ayudarte a aliviar los bochornos de manera natural, mantener las estancias bien ventiladas, huir de los cambios bruscos de temperatura son medidas que ayudan a afrontar o prevenir los bochornos. El alcohol, las comidas muy calientes o picantes deben evitarse, ya que actúan como desencadenantes. Si se presentan molestias severas, se debe consultar al médico para descartar causas más serias.